Tipos de bisagras

Aunque pueda parecer mentira, en el mercado hay una gran cantidad de tipos de bisagras entre las que elegir. Dependiendo de tus necesidades, deberás comprar un tipo u otra. Si no tienes claro cuál adquirir, a continuación, te vamos a mostrar un listado de las más comunes. Con este listado de bisagras, esperamos que te sea mucho más sencillo elegir el modelo que más se adapta a tus necesidades.

¿Qué es una bisagra?

Una bisagra es un herraje que cuenta con 2 piezas unidas. Esta unión es realizada a través de un eje, el cual permite que las diferentes piezas puedan girarse, sin separarse en ningún momento.

Las bisagras pueden ser usadas para muchos fines, aunque normalmente los muebles y las puertas son las que más las usan. Para ayudarte a conocer los principales modelos de bisagra, vamos a mostrarte los más interesantes.

Bisagras de libro

Comenzamos hablando de este modelo de bisagras. Son las más conocidas y las más comunes. Para comenzar son muy sencillas y muy fáciles de utilizar, de aquí que muchos objetos las usen. Dentro de este rango podrás encontrar diferentes modelos como las cincadas, las rústicas o las de latón entre otras.

Sea cual sea el modelo, la característica de este tipo de bisagra es que se abre en forma de libro y se pueden atornillar de manera sencilla a la madera. Así podrás unir dos cosas sin esfuerzo, como podría ser el caso de una puerta en un mueble.

Puedes estar seguro de que, si vas a trabajar con las bisagras de libro, no vas a tener problemas para conseguir unos buenos resultados. Son de las más sencillas de utilizar.

Bisagras de piano

Realmente son iguales que las anteriores, pero a cambio el tamaño es mayor. Gracias a su tamaño, tendrás que sujetarla con un número mayor de tornillos. Esto permitirá que la bisagra sea mucho más fuerte y por ello más resistentes al uso. Muchos de estos modelos son muy grandes, por lo que los tendrás que cortar según tus necesidades. Dependiendo del material, podrás cortarla incluso con una tijera de chapa y un poco de fuerza. Pero en algunos casos te hará falta usar una buena sierra de metal para realizar un buen corte.

Bisagras desmontables

Son una opción muy interesante, sobre todo si sabes que necesitarás desmontarlas. Gracias a esta opción, podrás desmontarlas sin tener que quitar los tornillos. Esto hace que el proceso sea muchos más cómodo, aunque realmente no son de las más usadas a día de hoy. Esto es posible porque cuenta en su punto de unión con un pasador. Si se lo quitas, la bisagra se separa, mientras que si se lo pones se vuelve a unir. Con este sistema podrás unir y desmontarla tantas veces quieras.

Bisagras de Pernio

Esta opción suele ser la más usada en las puertas y sobre todo en las ventanas.

El problema es que no son fáciles de poner, de aquí que si no tienes experiencia, tendrás que estar mucho rato intentando cuadrarlas. Por este motivo, suelen ser usadas únicamente por profesionales, las cuales ya tienen las medidas justas para ajustarlas rápidamente.

A la hora de ponerlas o como se suele decir, cajearlas, este trabajo puede realizarse a través de una fresadora o sin maquinaria a través de un formón. Dependiendo de las costumbres o herramientas del trabajador, estas bisagras serán puestas de una manera u otra.

Bisagras invisibles

Esta variedad también es conocida bajo el nombre de bisagras ocultas. Son perfectas para unir dos tableros y conseguir que los mismos se abran como un libro.

Bisagras de doble acción

Solo son utilizadas por regla general en las puertas que necesitan ser abiertas a través del sistema de doble apertura, como puede ser en el caso de las puertas de las cocinas de los restaurantes. Seguro que has visto las puertas que abren para dentro como para fuera y finalmente vuelven a su posición normal. Esta variedad de puertas usa estas bisagras, las cuales facilitan al camarero la salida y entrada de la cocina. Además, son muy fáciles de instalar, por lo que no tendrás ningún problema en ponerlas en tu puerta, siempre y cuando el espacio permita abrir la puerta tanto para dentro como para fuera.

Bisagras de cazoleta

Si te fijas en los muebles de tu cocina, lo más seguro es que te encuentres esta variedad de bisagra. Son las más usadas en este tipo de muebles, porque son muy prácticas y fuera del mueble no se ven.

Una de las ventajas de estas bisagras es que a partir de un cierto ángulo se cierra solas y tienen un ángulo de apertura muy amplio, aunque se puede regular.

En cambio, la desventaja es que no son para nada fáciles de instalar, ya que son bastante complejas. Ambas partes de unión tienen que quedar perfectamente encajadas. Cualquier mínimo error hará que la bisagra no haga su función correcta y por ello la puerta del mueble no abra y cierre de manera correcta.

Dentro de este rango es importante diferenciar los 3 tipos más importantes.

La bisagra de cazoleta recta se debe usar siempre y cuando la puerta sea exterior al lateral del mueble.

La bisagra super acodada es usada únicamente cuando la puerta es interior.

Finalmente, la bisagra acodada solo se usa cuando la puerta se encuentra en la zona intermedia.

Dentro de este rango, luego podrás ver diferentes modelos, tanto de grosor, de resistencia y tamaño. Es importante tener claro cuál es la que necesitas para poder elaborar o reparar tus propios muebles.

Bisagras de superficie

La función es muy parecida a la anterior, pero con la ventaja de que no tendrás que realizar un fresado para poder instalarlas. Estas son muchos más fáciles de instalar, aunque aún están muy lejos de superar a las anteriores, porque las empresas siguen apostando principalmente por las bisagras de cazoleta.

Si eres un aficionado al bricolaje y no te quieres complicar demasiado la vida, no lo dudes usa esta variedad y el mueble te quedará mucho mejor. Con un poco de cuidado y unos simples tornillos, podrás unir las dos partes del mueble sin problemas a través de esta bisagra.

Bisagras para vidrio

Estas bisagras tienen una parte en forma de U. Esta forma es la encargada de sujetar fuerte el cristal. Una vez sujeto, hay que sujetarlo con fuerza para evitar que el cristal se salga a través de uno o varios tornillos pensados para este fin. Una vez instalada, la puerta abrirá y cerrará, con la seguridad de que el cristal no se caerá.

Otras bisagras

En el mercado hay muchas otras bisagras entre las que podrás elegir. Pero al ser mucho menos conocidas y usadas, no te serán fáciles de encontrar. Por este motivo, en caso de necesitar bisagras de otro tipo, entonces deberás acudir a tiendas especializadas para que te las proporcionen.